El aroma de las plantas aromáticas se debe a la presencia de ac. e. (aceites esenciales), que son una representación concentrada y dinámica de las propiedades curativas de las plantas, además de contener su fuerza vital.
La unión de los nutrientes absorbidos por los vegetales aromáticos más la energía del sol producen estas vitales sustancias, producto del aire, la tierra, el agua, el fuego y el éter, los cinco elementos de la naturaleza concentrados en una sola gota.
La Aromaterapia sólo utiliza aceites esenciales naturales, puros y completos.
El concepto básico de la Aromaterapia es que el aceite esencial no debe tener ninguna concentración ni transformación para mantener las características químicas y vibracionales que tiene el vegetal.
Cipres (Cupressus sempervirens): Utilizado por los tibetanos como aroma de purificación. Su aroma induce a la serenidad. Desde la antiguedad se dice que es la representación de la vida después de la muerte. Por esto, es indicado en duelos, separaciones, cambio de carreras, mudanzas o profundos cambios espirituales. Disuelve patrones de estilo de vida. Muy bueno como desodorante ambiental, utilizado para eliminar olores caninos, especialmente en verano. Es buen antitranspirante. Excelente para venas varicosas. En baños de pies para descansar piernas.
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